Estrés: cómo identificar el dolor por estrés y combatirlo

El estrés es una respuesta del cuerpo ante las presiones diarias, pero puede volverse perjudicial cuando altera el funcionamiento diario, especialmente ante situaciones que percibimos como desafiantes o amenazantes. Aunque es una reacción normal, el estrés puede tener efectos negativos en la salud física y mental, manifestándose en diversos síntomas. Entre los síntomas de estrés más comunes se encuentran los dolores de cabeza, de cuello y de hombros, causados por la tensión acumulada en los músculos.

Entender cómo el estrés puede afectar a tu cuerpo es fundamental para poder manejarlo adecuadamente y evitar que se convierta en un problema mayor.

Síntomas comunes del estrés

El estrés puede presentarse de varias formas y cada persona puede experimentarlo de manera diferente. Algunos de los síntomas físicos más comunes incluyen:

Dolor de cabeza tensional: sensación de presión o tensión alrededor de la cabeza, especialmente en la frente y en las sienes. A veces, irradia hacia el cuello, asociado con la tensión de los músculos en la zona. Este tipo de dolor de cabeza por estrés es el más común y puede variar en intensidad, su duración va desde los 30 minutos hasta varios días.
Dolor de hombros y cuello: La tensión muscular en estas áreas es frecuente debido a las malas posturas y a la acumulación de estrés, que es la que produce dolor de cuello. Este dolor puede causar rigidez y molestias continuas.
Fatiga y falta de energía: El estrés puede agotar tus reservas de energía, haciendo que te sientas cansado constantemente.

Identificación del dolor por estrés

Reconocer el dolor causado por el estrés es crucial para poder abordarlo de manera efectiva. Aquí te presentamos los principales síntomas para identificarlo:

Dolor de cabeza por tensión (cefalea tensional)

Como ya lo mencionamos, el dolor de cabeza es uno de los síntomas de estrés más comunes. Se caracteriza por una sensación de presión o dolor constante en ambos lados de la cabeza, que pueden extenderse al cuello y a los hombros. Si experimentas constantemente dolor de cabeza tensional, es probable que este tipo de dolor aparezca debido a situaciones de estrés, incluso por situaciones específicas en el trabajo, como el estrés laboral.

Dolor de hombros y cuello

El estrés también puede llevar a la tensión muscular en el cuello y los hombros, provocando dolor y rigidez en el cuello. Este tipo de dolor suele empeorar con el tiempo si no se trata adecuadamente, y puede afectar la movilidad y la calidad de vida, por lo que es importante identificarlo y tomar medidas para controlar el estrés y aliviar el dolor.

¿Cómo combatir el dolor por estrés?

Para aliviar el dolor por estrés, lo recomendable es adoptar hábitos que te ayuden a reducir la tensión muscular y mejorar tu bienestar general. Aquí te dejamos algunos consejos:

Técnicas de relajación

Practicar técnicas de relajación como la meditación, el yoga y la respiración profunda puede ayudar a reducir los niveles de estrés y la tensión muscular. Estas prácticas promueven la calma y mejoran la capacidad del cuerpo para manejar el estrés.

Ejercicio regular

El ejercicio físico es una excelente manera de liberar el estrés acumulado. Actividades que puedes hacer en el día a día, como caminar, correr o incluso nadar ayudan a liberar endorfinas, que son las hormonas que mejoran el estado de ánimo y ayudan a reducir el dolor.

Uso de Aspirina®

Para el alivio del dolor de cabeza causado por tensión muscular y estrés, Aspirina^® es una opción efectiva. Este analgésico ayuda a reducir el dolor por estrés y la inflamación, proporcionando un alivio efectivo y duradero.

Alivia el dolor de cabeza por estrés con Aspirina® Go

Al igual que los comprimidos de Aspirina®, Aspirina® Go contiene ácido acetilsalicílico. La diferencia es que Aspirina^® Go viene en un formato de gránulos solubles con sabor naranja que puedes tomar sin agua. Esta presentación de Aspirina^® Go brinda un rápido alivio del dolor de cabeza, dolor de hombros o de cuello por estrés, y también es efectiva contra la fiebre.

Mantener una buena postura

Asegurarte de mantener una buena postura, especialmente si pasas mucho tiempo sentado en el trabajo, puede ayudar a prevenir la tensión en el cuello y los hombros. Ajusta tu silla de trabajo para que te sientas cómodo. Esto ayudará a reducir la presión sobre tus músculos en esa zona del cuerpo.

Hacer pausas regulares

Tomar descansos regulares durante el día puede ayudar a reducir la tensión acumulada. Levántate, estira los músculos y da una vuelta para evitar que el estrés se acumule.

Consultar a un profesional de la salud

Si el dolor persiste o es muy frecuente y no estás seguro de que el estrés sea la causa, o si has tomado medidas para controlarlo y sigues teniendo síntomas, es importante consultar a un profesional de la salud para obtener un diagnóstico y tratamiento adecuado. Es posible que el médico pueda verificar otras causas del dolor, o bien, dirigirte con un especialista o terapeuta que te ayude a encontrar las fuentes del estrés y enseñarte nuevas técnicas para afrontar situaciones difíciles.

Fuentes de referencia: